Datos históricos / Descripción
La orden de los mercedarios es una de las más antiguas que se instalaron en la ciudad de Mendoza. En 1576, fundó el convento de Santa Catalina en una de las calles de ronda de la ciudad colonial, fuera de la traza inicial.
La manzana mercedaria se ubica entre las actuales calles Montecaseros, Córdoba, Ituzaingó y San Luis.
En la época colonial fueron dos los templos que se realizaron, el primero construido en el siglo XVII, y el segundo a mediados del siglo XVIII realizado en ladrillo.
La orden mercedaria fue una de las que colaboró en la gesta libertadora. En uno de sus salones funcionó la “sastrería” donde se confeccionaron algunos de los uniformes para los oficiales del Ejército de los Andes. Además, en la iglesia están los restos del General José Albino Gutiérrez, quien participó de la formación del Ejército de los Andes y falleció en 1831 en el fuerte de San Carlos.
El terremoto de 1861 destruyó tanto a la iglesia como a sus construcciones anexas. A los pocos años se
edificó un nuevo templo, impulsado en 1866 por el padre Apolinario Vázquez, uno de los fundadores de la villa de Maipú. La obra no duró mucho. La inundación de 1895 lo dañó y debió demolerse.
En 1899, se hizo una nueva reconstrucción. El templo finalmente se inauguró en el año 1909.
La estructura se planteó con una trama de rieles ferroviarios y mampostería de ladrillo. Su fachada remite al lenguaje neo-manierista, expresion más utilizada a comienzos del siglo XX, en el marco del historicismo imperante.
El conjunto se destaca por una rica volumetría, dada por la articulación de los espacios. La fachada se organiza a partir de un cuerpo alto de dos niveles, coronado por frontón triangular. Las torres quedaron truncas, pues no se construyeron como habían sido proyectadas. Otro elemento sobresaliente es la cúpula sobre pechinas, sostenida sobre un tambor cilíndrico. Está coronada además por una linterna y recubierta por mayólicas azules y blancas. Posee en su interior un valioso patrimonio artístico. Las pinturas realizadas en 1932 por los artistas Luis Marsonet y Bruno Brusadin. En el Camarín de la Virgen, ubicado sobre el altar mayor, se encuentra una imagen de la Virgen de la Merced, llamada “Virgen del terremoto”, porque sobrevivió al terremoto de 1861.
El conjunto original se completaba con un claustro y otras dependencias construidas en adobe que debieron ser demolidas luego del terremoto de 1977 en Caucete, San Juan.
El terremoto de Mendoza de 1985, provocó graves lesiones en su estructura. El equipo de profesionales conformado por el arquitecto Aniceto Puig y los ingenieros Espinosa y Matons estudiaron los refuerzos estructurales y lograron consolidar sus principales elementos: la nave central, las naves laterales, la cúpula y las torres de la fachada.
Las últimas intervenciones en el edificio, datan del año 2009 y consistieron en la recuperación de los locales y patio situado en calle Montecaseros y de las pinturas en la nave principal. Participaron del proyecto los arquitectos Juan Carlos Marinsalda y Ana Correas, junto al ingeniero Daniel García Gei.